Braquioplastia

La braquioplastia o lifting de brazo es una intervención quirúrgica,  de carácter estético cuyo objetivo es erradicar el exceso de grasa y flacidez para mantener los brazos firmes y tersos.

Básicamente se realiza por dos razones, edad y pérdida de peso. A medida que envejecemos, la piel de los brazos suele volverse flácida y se cuelga, lo mismo ocurre cuando se pierde mucho peso y la piel comienza a colgar.

La braquioplastia se lleva a cabo bajo anestesia general y de manera ambulatoria u hospitalaria depende el caso, por lo que el paciente será dado alta el mismo día.

Para llevar a cabo el procedimiento el médico deberá considerar si es un paciente adecuado para dicha intervención. Una vez hecho el diagnóstico y si el exceso de piel es poco el procedimiento consiste en una pequeña incisión en la cara interna de la parte superior del brazo, por el contrario, si la cantidad es mayor se puede requerir a una abertura desde la axila hasta el codo o únicamente en la axila, hecha la incisión se retira y ajusta el exceso de piel. Este procedimiento puede combinarse con otros tratamientos como liposucción si se desea también extraer grasa. El tratamiento quirúrgico dura de 2 a 3 horas.

El paciente podrá volver a su vida normal en un periodo de 7 a 15 días, por lo cual es recomendable contar con alguien que pueda asistir al paciente en días posteriores.

La braquioplastia no genera cicatrices visibles.